Profundizamos en lo tangible, aquello que podemos ver y tocar, pero igualmente a veces sentimos ajeno; NOSOTROS.
Disfrutando de los elementales y el silencio del desierto en el corazón del santuario natural de la reserva indígena Comcaac, viviendo como lo hacían los ancestros en perfecto equilibrio y armonía con la naturaleza y toda forma de vida, para vivir y recordar lo esencial.
Recordamos que la sabiduría no se encuentra en la agitación constante de la mente o en la búsqueda incesante de respuestas externas, sino en la quietud y la reflexión interna.
Después de esta experiencia, ya no habrá espacio para anulaciones hacia ti mismo.
Es completamente entendible si de pronto te sientes abrumado, mucho más al estar en un mundo tan agitado y desorientado, incluso casi hasta deshumanizado como el que vivimos ahora.
Esa sensación de zozobra y fatiga es de las primeras señales de que necesitas reconectar tu atención y tus energías en lo verdaderamente importante: TÚ y tu retroalimentación con la naturaleza.
Por eso existe Divinamente Humano, un espacio para desprenderte de argumentos intelectuales, creencias limitantes y permitirte ser tocado por lo sagrado.
Por medio de este retiro, te ayudamos a aceptar la totalidad de lo que eres, llámese oscuridad, resentimiento, miedos, porque sólo al reconocer, aceptar e integrar todos tus matices, es cuando realmente te puedes expandir hacia tu totalidad.
Después de esta experiencia, ya no habrá espacio para anulaciones hacia ti mismo.
Inmersos en las prácticas milenarias de honrar, cuidar y proteger la vida y todo la existencia, darás prioridad a la conexión más importante de todas: el nexo contigo y tu entorno.
Soltarás todo aquello que te distrae y te separa de tu energía y tus propósitos.
Durante 5 días y 4 noches, experimentarás las siguientes actividades:
Incluye: